Momentos que no volverán.Vol. I

Presten atención hijos de puta, porque estoy dándome un baño de melancolía musical y no quiero que me toqueis demasiado los huevos.
Os traigo momentos que no volveran porque por mucho que digan, la música y la gente está muerta desde hace casi treinta años. En los 80 se vivieron los últimos coletazos del buen gusto, pero quedaron empañados por una panda de gayers que solo buscaban sacar tajada de la ambigüedad del momento. Y de los 90 a esta parte lo único que hay es un hatajo de maricones repeinados amantes del karaoke en los cuales podemos ver reflejada la esencia de la sociedad en la que vivimos.

Me cago en la televisión, me cago en las discográficas, me cago en las productoras, me cago en los farsantes, me cago en los royalties, me cago en el sistema educativo, me cago en los gobiernos, y me cago en no se cuantas cosas más, me cago en cuantos cabrones han colaborado en la detrucción de la cultura y en los cerdos que anestesian las inquietudes del ciudano.

Para colmo aparecen en escena los Emo.

Bueno hermanitos como podeis apreciar tengo los cojones muy inflados, por lo tanto relajémonos con el bueno de Chuck.