miércoles, 7 de noviembre de 2007

Rasca mama... pero to pa dentro!!

Las hemorroides son dilataciones de las venas de los plexos venosos de la mucosa del recto o del ano. Si las afectadas son las del plexo superior se llaman hemorroides internas, se sitúan por arriba del conducto anal y se encuentran cubiertas por mucosa.

Las medidas generales para su cuidados son dos:

A: Para reinas fifis y mariconas asilvestradas.

- Mantener una buena higiene anal y evitar rascar o frotar las hemorroides, para ayudar a prevenir las infecciones.
- Corregir el estreñimiento añadiendo fibra a la dieta: frutas, verduras, pan integral, líquidos abundantes.
- Corregir las diarreas.
- Evitar comidas muy sazonadas y el consumo de alcohol.
- Evitar esfuerzos al defecar. Reducir el tiempo de defecación. Utilizar papel higiénico suave o limpieza anal mediante baño con agua tibia
- Aplicar hielo o compresas frías en la fase aguda del trastorno. El frío hará disminuir la hinchazón.
- Darse luego baños calientes en la zona dos o tres veces al día. Esta secuencia frío calor es una forma de aliviar temporalmente el dolor por hemorroides externas.
- Las cremas corticosteroides de venta en oficinas de farmacia pueden ayudar a disminuir el dolor y la hinchazón. Las cremas para hemorroides que contienen lidocaina (que también se venden sin receta), alivian el dolor y las compresas de ocozol americano, aplicado con motas de algodón alivian la picazón.


B: Personas con gónadas de acero.






El Sargento Hartman recomienda SIEMPRE la opción B, todo lo demás son chorradas y mariconadas comunistas

1 comentario:

El Gran Humungus dijo...

El Sargento de Instrucción Hartman es uno de esos individuos que te hacen creer en que nuestra puta especie tiene aún esperanzas. Es el último mohicano, un John Connor cruzado con un Predator venido del futuro que sabe que la única manera de evitar que esto se vaya al carajo es INSTRUCCIÓN DE MACHOS. Y puede que sus consejos y órdenes duelan, pero son nuestra única salida.

Duelen, pero me gustan.